HIPOLITO CORONADO

Es irrisorio y patético hasta donde es capaz de llegar el ser humano para satisfacer sus deseos, y cuando no son cumplidos estos; la bajeza aflora hasta el límite concebido; en esta otra tragedia de EURIPIDES, se desata una pasión mal sana incestuosa y tiene como protagonista a un joven llamado HIPOLITO el cuál ha conservado su castidad (extraño en un hombre) y cuya protectora es la diosa ARTEMISA, pues bien AFRODITA celosa del cariño que HIPOLITO le profesa a ARTEMISA, busca vengarse de este, y lo hace a través de inducir a FEDRA madrasta de HIPOLITO y esposa de TESEO, de mal de amores hacia su hijastro, FEDRA sabe que es mal sano este amor que siente por su hijastro, y decide dejarse morir, sin embargo , y a pesar de saber que el muchacho no tiene culpa alguna decide inculparlo de haber ultrajado el lecho nupcial en ausencia de su padre , y escribe una carta para ser leída después de su muerte, FEDRA se suicida y la carta es leída por TESEO que sin esperar prueba alguna le pide a POSEIDON le conceda la gracia de aniquilar a su hijo HIPOLITO, de nada sirven las suplicas que HIPOLITO le hace a su padre ni las explicaciones que le da , TESEO esta inflexible en su postura y POSEIDON cumple su deseo e HIPOLITO es herido de muerte en feroz batalla con una bestia venida del mar, el moribundo cuerpo del hijo de TESEO es llevado hasta su presencia y este inconmovible hasta que se aparece ARTEMISA y le hace ver su confusión, de nada sirve ya las lamentaciones de TESEO, pues su hijo esta a punto de morir, y sin embargo, en un gesto noble su hijo le perdona por el error cometido y TESEO se lamenta lastimeramente por no haber atendido a la voz de la razón .
EURIPIDES en esta tragedia nos coloca en una situación común entre nosotros, un deseo insatisfecho y una venganza sin razón , pues si bien FEDRA amaba a HIPOLITO, este no , y tan solo por ello debió respetar esa decisión más sin embargo no fue así y busco venganza en un ser que no hizo más daño que no amarla , no entiendo ese  amor, pues considero que cuando se ama lo único que se desea es la felicidad del otro, aunque ese otro no quiera esa felicidad a nuestro lado .
De cualquier manera, vale la pena como siempre lo he dicho, volver a los clásicos para conocer el esplendor de la tragedia griega , que no dista mucho de lo que pasa hoy en nuestros días.
Gracias
JMM